Cada vez son más las mujeres que optan por la cesárea no por razones médicas, sino "a demanda". Realmente tiene sentido: sin dolor y sin consecuencias desagradables del paso del bebé por el canal del parto.
Gracias a la cesárea, ahora es posible ser madre y, al mismo tiempo, tener mejor figura que antes del embarazo. Esto es gracias al servicio del llamado "parto de belleza", que ya está muy extendido en Europa y Canadá.
La esencia del método es la siguiente: inmediatamente después de la cesárea, cuando se lleva al bebé para pesarlo, el médico realiza una liposucción y elimina la grasa y el exceso de piel del abdomen. Se tarda unos cuarenta minutos más en hacerlo todo.
Por lo general, las pacientes se recuperan de una cesárea en 3-4 días, máximo 5 días.
Al tercer día, suelen irse a casa desde el hospital.
Se sigue aproximadamente el mismo ritmo cuando se combinan las dos operaciones. A veces el paciente se retrasa
en el hospital un día más.
Prácticamente todo depende de cada operación. Pero, en general, somos muy optimistas sobre los partos de belleza con la paciente y el cirujano adecuados.
Las ventajas son evidentes: una anestesia para dos operaciones, una sutura, una intervención quirúrgica y un periodo de rehabilitación. Además, no tienes que perder peso. Y una cosa más: las antiestéticas cicatrices que quedan tras una cesárea ya no deben molestarte: es el cirujano plástico quien controla su calidad y estética durante el parto.
Ser mamá y conseguir una figura mejor que antes de dar a luz es posible con Canada Mama Consulting.
